El año 2017 esta por terminar, y para la ciudadanía de la capital industrial ha sido un año singular. La ciudad se enorgullecía de que en nuestro Aeropuerto Ramon Villeda Morales, íbamos a tener el único vuelo directo entre Europa y Honduras. Finalmente se empezaba a ver obras de infraestructura concluyendo en el tiempo establecido. Se podían observar los cruces de cebra en las intersecciones de la tercera avenida y primera calle, aparte que los conductores empezaron a respetarlos, y no digamos los semáforos peatonales que lindo es ver como la ciudadanía espera su momento para cruzar por el lugar que le corresponde. Parecía que este 2017 iba a ser un año de alegrías para la ciudad, y que no iba a suceder algo que lo podría devastar esas pequeñas alegrías que nos hacían olvidar todas esas políticas de gobierno provenientes de la capital, que han perjudicado al territorio nacional y no digamos a la ciudad que produce mas del 40% del PIB del país . Llegaban las elecciones y el actua